Para el próximo sábado 27 de junio hemos preparado una ruta por Madrid cargada de historia, de sorpresas y de anécdotas que se llama el “Madrid histérico, gilipichi y pendón”.
A nuestro encuentro saldrá en la plaza de Ópera la estatua de Isabel II, que si nos fijamos tiene el cuello más grueso que la cintura y una carita de santa que no le corresponde porque si hablamos de pendones nuestra Isabel era soberana.
Por las calles que vamos a recorrer, ya antaño eran también pisadas por diversos grupos de pendones verbeneros que según el siglo del que hablemos van a recibir diferentes nombres. Según nos informa Nicolás Fernández de Moratín en el siglo XVIII las más conocidas eran la Isidra, “por su gran mar de tetas”, Benita que atraía a los clientes “por sus pechos desiguales” y “La Aguedilla” por ser especialista en “frailes y clérigos embozados”.
En la Plaza de Ramales nos sorprenderán lo guarros porque según la experta opinión de Lobera de Ávila, médico personal del Emperador Carlos V, lo ideal era que tras levantarse de la cama se asease únicamente la cara y las manos dejando el baño para los enfermos. Del baño se huía como de la peste pues se pensaba que destruía las fuerzas, hacía descender los malos humores, provocaba vómitos y desmayos, ablandaba el cuerpo y por si todo esto era poco, afeminaba al hombre.
Pero si había cerditos reacios al agua también hubo periodos donde los hombres cuidaban su aspecto tanto o más que las mujeres. A estos se le llamaba petimetres y estaban tan obsesionados con su aspecto que no dudaban en lucir múltiples anillos, hebillas, cintas y botones, llegando algunos a usar corsé para lucir figura fina y para no estropear su peinado los había que dormían la siesta con la nariz pegada a la almohada. De los petimetres y petimetras os hablaremos en la calle de Sacramento, pero también durante el recorrido aparecerán histéricas menstruantes, cursis, horteras, cabezas colgadas o incluso caballos roncadores.
Descubrirás esa parte de Madrid que no sale en los libros, curiosidades y anécdotas con las que verás Madrid con otros ojos cuando vuelvas a pasar nuevamente por esas calles. ¿Te apuntas?
El recorrido se inicia a las 10.30h en la Plaza de Ópera, estatua de Isabel II, paseando por la plaza de Ramales, Calle Bailén, Cuesta de la Vega, Viaducto, Pretil de los Consejos, Calle Sacramento, Calle del Rollo y Calle Segovia, finalizando en la Plaza de la Cruz Verde. La duración aproximada es de 3 horas y su precio de 10 € por persona. El número de plazas es reducido, no te quedes sin la tuya.
Interesados:
ANTONIO BALDUQUE ÁLVAREZ
Tlf: 665985093
Mail: antoniobalduque@gmail.com
www.curiomadrid.com
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Aprende y disfruta conociendo el Madrid histérico, gilipichi y pendón de una forma simpática, amena, diferente, documentada y sorprendente.
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