En esta ocasión, aprovechando que se ha celebrado recientemente el Día del Libro, hablaremos sobre una novela histórica que retrata de manera muy vívida, cruda y a la vez realista el Madrid de la época de Carlos II. Fue el fin de una dinastía monárquica en España, la de los Habsburgo o Austrias, que ya llevaba décadas de decadencia, depresión y vorágine autodestructiva. Y fue un periodo histórico en España muy marcado por la honra, el honor, el engaño, las intrigas políticas, el hambre general de la población y la lucha en fin por la supervivencia en todos sus sentidos: a nivel social, de poder y en última instancia de la propia persona o familia. En este contexto se inserta el libro del que os hablamos.
EL LIBRO EN CUESTIÓN
Su título ya es un presagio y a su vez nos suscita un interés inmediato: “Tu gloria será eterna”. La autora, Carmen García, lo extrajo de las palabras que contiene una aguada de Francisco de Goya, que en la actualidad se encuentra en el Museo del Prado, y que pertenece a la serie: Condenados, presos y torturados por la Inquisición. La escritora se decidió por este título a modo de agradecimiento al personaje histórico Diego Mateo Zapata, médico de origen portugués que estuvo preso en dos ocasiones en las cárceles de la Inquisición y que inspiró una parte de la novela.
La autora retrata como nadie tradiciones, costumbres, usos, oficios, etc, de esta época. Nadie como ella para describir como el submundo que se mueve por los barrios bajos de aquel Madrid, entre Tenerías, Rastros y Mataderos. El duro oficio de despellejar animales, preparar pieles, cargar con las mercancías y venderlas. La inquisición como tema esencial con su limpieza de sangre, normas y trasuntos. Y además de esto, por encima de todo el honor, la honra como un emblema que es mejor conservar que la vida. Cada página te imbuye en este mundo con tanto acierto que casi crees verlo con tus propios ojos.
En fin y como resumen, “Tu gloria será eterna” es la historia de un hombre justo que trató de vivir con honor y en paz a finales del siglo XVII. Una época compleja donde la supervivencia justificaba cualquier medio, incluso el asesinato en el nombre de la fe. A través de las reflexiones de Alonso (el personaje principal) se irán desvelando amores prohibidos y secretos de familia.
LUGARES CON MUCHA HISTORIA
A pesar de la portada del libro, una preciosa imagen del Alcázar de Segovia tras una nevada, la acción principal trascurre en Madrid y es allí donde se mueven e interactúan los personajes principales. Veamos algunos de los escenarios que aparecen en la obra con los ojos de su época y la correspondencia con los lugares de la actualidad.
Convento de San Hermenegildo: Actualmente solo queda de él la Iglesia, ya que el convento fue desamortizado. Se construyó a principios del siglo XVII aunque fue reformada su iglesia posteriormente por Pedro de Ribera ya muy entrado el siglo XVIII. De su nombre original solo quedan señas por una escultura del Santo que hay en su pórtico de entrada. Los monjes fueron exclaustrados y posteriormente fue ocupado por carmelitas; de hecho la capilla de Santa Teresa dentro de la propia iglesia es de un tamaño considerable. Actualmente es la Iglesia de San José o de los Carmelitas, en la confluencia de la Gran Vía con la Calle Alcalá.
El Rastro: Toda la zona que hoy en día llamamos El Rastro, mercado de productos “de todo tipo” actualmente, y desde principios del siglo XVIII lugar de matutería o venta de mercancías robadas o “extraviadas”, fue desde tiempos medievales el emplazamiento de los lugares de matanza y despiece de Madrid. De hecho la Plaza de Vara de Rey y antes la plazuela de Cascorro fueron los Mataderos de Madrid, y como las calles siguientes quedan en pendiente descendente hacia el río, dieron en llamarse “Rastro”, por los rastros de sangre y menudencias de animales desperdigados por allí. También aquí se ubicaron, hasta que los Reyes vieron nociva su cercanía a la población, las Tenerías, Batanes, Tintorerías y Curtidores, de ahí ciertas calles y denominaciones al respecto.
Calle de Francos: Esta calle era llamada así por una familia de importancia en Madrid, de la cual llegaron a ser varios de sus miembros Concejales e incluso Alcaldes desde tiempos medievales. Posteriormente, ya en el siglo XVII vivieron en ella Miguel de Cervantes y Lope de Vega, enemigos acérrimos. Y finalmente en el siglo XIX cambió su nombre por el de Cervantes, ya que al inicio de esta calle se encuentra el lugar donde estuvo su última morada (derribada poco tiempo antes de homenajearle). Aunque olvidando que Lope también construyó allí su casa (actualmente reconstruida); para subsanar el error se puso su nombre a la calle paralela y por eso donde fue enterrado Cervantes lleva el nombre Lope de Vega y donde vivió Lope el de Cervantes.
La Inquisición: En Madrid tuvieron lugar los Autos de Fe más significados con la Plaza Mayor como escenario, antes en la famosa Plaza de la Cruz (el nombre no puede ser más explícito ya que los oficiales de la Santa Institución vestían túnicas de ese color). El quemadero de la Inquisición estuvo también donde ahora se encuentra la Glorieta de Ruiz Giménez (metro San Bernardo). Pero el Tribunal de la Inquisición y sus temidas mazmorras se encontraban entre la Plaza de Santo Domingo y el final de la Gran Vía. Lugares de terror indescriptibles que ya no se conservan, pero la mejor forma de imaginarlos es visitar una autentica cárcel del siglo XVII. Y existe. Y en Madrid. En la calle de la Cabeza cortando con la calle Lavapiés hay un Centro de Mayores, y en sus bajos aún se conservan los calabozos de la Cárcel de la Monarquía, de este mismo periodo del que hablamos.
Cementerio de la Iglesia de San Sebastián: Actualmente tampoco existe este lugar ya que fue definitivamente eliminado tras los destrozos de la Guerra Civil. De hecho de la Iglesia solo queda la capilla de los Arquitectos, donde están enterrados entre otros Ventura Rodríguez y Juan de Villanueva. Ahora su lugar lo ocupa una bonita tienda de flores con pequeño jardín romántico incluido. Pero es bueno saber que aquí, entre otros, fue enterrado el propio Lope de Vega. Y también se sabe que José Cadalso, autor de Cartas Marruecas entre otros textos, acudía aquí cada noche a llorar a su amada muerta pocos días antes de su boda; e incluso una madrugada no soportó más su dolor y desenterró su cadáver para darle un último abrazo.
Me despido nuevamente de vosotros agradeciendo encarecidamente a Carmen haber podido contribuir mínimamente a su libro con mis humildes conocimientos históricos y recomendándoos encarecidamente la lectura de esta novela que os transportará completamente al Madrid de finales del siglo XVII.
**Se puede adquirir en LA LIBRERÍA, situada en la Calle Mayor, 80, para mí la mejor librería histórica de Madrid o a través del siguiente enlace: https://librosderviche.com/producto/tu-gloria-sera-eterna. ¡Saludos y buena lectura!
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