¿Buscando nuevo destino cultural y gastronómico? Pues toma buena nota que hoy te propongo viajar a campos de Castilla, para disfrutar de la interesante e imprescindible propuesta gastronómica de Trigo (con una estrella Michelin y dos soles Repsol).
Desde Madrid y en apenas una hora te plantas en Valladolid con RENFE! Por lo que el tema de la distancia ya no será una excusa. Si además, viajas en fin de semana y eres un apasionad@ de los trenes, te propongo echarle un vistazo al “Tren de Zorrilla” con un completo plan turístico y cultural de la ciudad. Con parada para comer en Trigo (reserva con tiempo porque cuelgan el cartel de completo los fines de semana).
COCINA HONESTA EN TRIGO
En 2007, Víctor Martín (en los fogones) y su mujer, Noemi Martínez (sumiller y responsable de sala) hacían realidad su sueño con la apertura de Trigo, restaurante cálido y acogedor en el que verdaderamente te sientes como en casa, en el que saboreas cocina hecha con el corazón y con los mejores productos de temporada de Castilla y León, que seleccionan con esmero.
¿Su COCINA? La cocina de Víctor es sabrosa y con fondo, donde técnica y el recetario clásico se dan la mano. Contemporánea de base tradicional, con elaboraciones que no enmascaran el producto y lo potencian, una cocina de la que podrás enamorarte. Se mueve al son de la temporada, armonizada con la maestría de Noemi Martínez, algo traviesa y a la que dejar volar. Mi recomendación… déjate llevar, deja que te sorprenda con su amplia bodega! Seguro que te descubre vinos que pasarán a engrosar tu lista de favoritos. Ha sido premiada como Mejor Jefa de Sala por la Academia de Gastronomía de Castilla y León.
He visitado Trigo en varias ocasiones y he notado una evolución que me hará volver en un futuro. A principios de junio les acompañé en su visita a los campos de la familia Belloso en Tudela de Duero —uno de sus proveedores de confianza—, y pude comprobar «In Situ» cómo seleccionan los espárragos, alcachofas… ¡Del campo a la mesa, literalmente! Tras la vuelta al restaurante, probamos éstos en elaboraciones creativas a la par que honestas con el producto. La tierra de Castilla y León es su despensa.
OFERTA GASTRONÓMICA
Actualmente ofrecen dos menús degustación (por 40€ y 55€) y opción de carta. Yo probé el Menú Festival (55€, sin maridaje) con algún plato más. Y de decir que el precio está muy bien, excelente relación calidad precio la de este restaurante Estrella Michelin.
Me gustó el detalle del aceite de oliva para untar con pan, yo que soy muy de AOVE, no dudo en pedir y valorar los restaurantes que comienzan con buenos aceites de oliva virgen extra de la tierra.
Entre los aperitivos, a destacar la suave «Mousse de espárrago verde».
Imprescindibles en TRIGO son el «Foie con frutos rojos», con frambuesa al romero y esferas de grosella (que llegó para quedarse hará algo menos de un año), junto al «Arroz Ibérico», que no dudo en repetir en cada visita. Este sándwich de arroz tostado con un velo de papada ibérica (curada y ahumada) que acompañan con alioli tradicional, está entre mis TOP de Trigo y somos muchos los clientes que le rogamos a Víctor que por favor, no lo quite de la carta!!! Pídelo y me cuentas.
Sorprendente «Los espárragos que querían ser calçots», interesante y sabroso, un platazo! Una pena que ahora los espárragos estén fuera de temporada y que tengas que esperar a la nueva temporada, ojalá lo recuperen en su carta. Asan los espárragos y les añaden tinta de calamar, servidos junto a tiras de calamar y espuma de hinojo.
Según avanza el menú, es una montaña rusa de sensaciones y de sabores, de apuesta por el mejor producto. Podría decir que ninguno de los platos me decepcionó. Incluso diría que me parece muy económico para la calidad de las materias primas y elaboraciones.
Y llegó el momento de otro de sus TOP, «Guisantes con setas de primavera». Guisantes de Tudela de Duero con perrechico. De meterte la cuchara en boca, explosionar y quedarte sin palabras. No escatiman con los guisantes de lágrima.
Muy recomendable también su mar y montaña de «Cocochas con pil-pil de montera y habitas», coronadas con polvo de jamón ibérico, con una salsita con intenso sabor ibérico.
Y antes de llegar los postres, una tierna y jugosa «Pularda, alcachofas, salsifis y chalotas a la crema».
Para poner el punto dulce a la velada, un prepostre de «Tarta de queso» y para los que somos amantes de las torrijas, una interesante y ligera «Torrija al vino» que os recomiendo sin dudarlo. Me ha gustado mucho esta versión, tan diferente a las muchas de torrijas que he probado. Borra el chip, para nada se trata de un postre pesado.
TRIGO es producto de temporada, es técnica unida al recetario clásico junto a una cuidada presentación y delicadeza a la hora de emplatar. Chapó por el maridaje con el que nos sorprendió Noemi. El precio de la armonía es de 25€. Te recomiendo dejarte llevar por su acertado criterio de elección, que apuesta por vinos de la tierra.
La experiencia es más que recomendable: deliciosa cocina con inmejorable relación calidad-precio, junto a un ambiente agradable, trato cercano y amable, ¡gran equipo el de TRIGO! Bien merece una escapada a Valladolid para darte un homenaje, además está en pleno centro, por lo que es el restaurante perfecto para un día de turismo en la ciudad.
¿NOS VEMOS EN TRIGO?
LUGAR: Calle Los Tintes, 8. Valladolid
HORARIO: De martes a sábado, de 13:30 a 16:00 y de 21:00 a 23:00 h. Domingos y lunes cerrado.
RESERVAS: 983115500
MÁS INFO: www.restaurantetrigo.com
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