Risas, risas, risas y más risas. Qué crítica se puede hacer a un espectáculo en el que te hacen que salgas con dolor de mandíbulas???
Bueno, pero se pueden comentar muchas otras cosas que a todos nos interesan de una función.
Estuve el domingo, en horario vespertino. La Gran Vía cortada, interesante por lo peculiar de la situación, y cómo me gustan las señales intuí que la tarde se presentaba prometedora. No me equivoqué.
Al entrar al teatro comencé a elucubrar si la sala pequeña, en la que me encontraba podría haber sido un antiguo bar de copas en los años 80… Me sorprendió sentarme en una butaca de cine, a ver teatro. Bueno, lo que imaginaba que iba a ser teatro, porque como no soy muy aficionada a “los monólogos” y estaba claro que LA CAVERNÍCOLA, iba a ser la versión femenina…
Lo primero que llama mi atención es la música de ambiente por su mala calidad, creo que habría que mimarla un poquito más… No entiendo muy bien la escenografía, pero como Yolanda Ramos ya la crítica dentro del show, no hace falta que yo diga nada más. La primera sensación es extraña, un poco de: ¿de qué va esto? Hasta que abre la boca y con toda la ingenuidad del mundo te arranca la primera carcajada ¡¡¡Sorpresa!!! Con una interpretación que es tan real como el espacio, la hora y las circunstancias… En todo momento estuvo improvisando sobre un texto muy elaborado y divertido. No creo que sea una crítica machista, sino más bien un reconocimiento a la convivencia y a las vicisitudes que todos experimentamos, vistas de la manera más divertida y con un tinte de realidad que te hace sentir tan especial como el resto de los mortales. “Ni mejor, ni peor, diferente”.
El guión: Fresco, ágil y ameno. Cumple su función- hacer reír.
La dirección: Sencilla, con una actriz como Yolanda Ramos creo que bastante fácil de ejecutar.
La interpretación: Tan coloquial, que parecía que no estuviera interpretando, consigue que te sientas un/a colega más en su fiesta. Aunque el personaje sea de Parla, me faltó como actriz, que terminara las palabras, que no se comiera la última sílaba y sobre todo me hubiera gustado que no actuara con micro. (Pero eso es otra guerra)
La escenografía: Me sobraban elementos. Parecía la casa de los Picapiedra, pero como ya he mencionado antes: la protagonista utiliza la crítica al decorado como parte de la representación y eso se agradece.
Iluminación y Sonido: Se merecen el mismo comentario: por favor! De Cavernícola hace el personaje, la parte técnica debería estar un poco más actualizada, sin “chicharras” en el sonido y con un mínimo de sensibilidad en los cambios de luz y los efectos. Arropar un espectáculo es un arte, no una obligación.
El vestuario: Bien, acorde con lo que nos quiere contar.
Evidentemente si queréis pasar una hora y media muy divertida, sin juzgar nada, sólo dejándote llevar… Os la recomiendo!!! Yo me lo pasé fenomenal (más, cuando decidí dejar de “observar”, jajaja)
Por cierto, si vas con tu pareja todavía os podréis reír más, porque cuando salgáis la conversación está asegurada recordando los comentarios tan genuinos que tiene.
A DISFRUTAR!!!!!
Pequeño Teatro Gran Vía
C/Gran Vía, 66. Madrid
Fechas: 2ª Temporada desde el 3 de septiembre 2015.
Horarios: Jueves y viernes a las 20:30h, sábados a las 19:00h y 21:00h, domingos a las 18:00h.
Precio: Desde 16€
Comentado