Si hay un barrio que cada vez pisa más fuerte, ese es Lavapiés. Hoy os hablo de una cafetería de reciente apertura que descubrí hace un par de semanas en búsqueda de un sitio donde merendar con buen café.
Vaya odisea cuando se acercan las 20h de la tarde y no te apetece aún cenar pero si una merienda tardía porque comiste pronto. Gracias a callejear en esta ocasión, descubrí nueva cafetería con encanto para mi lista. No llevaba la cámara encima, así que las hice con el móvil, prometo volver y traeros fotos chulas, así tengo excusa para probar más de su carta.
Cada vez me gusta más dejarme llevar, acabo descubriendo por sorpresa sitios muy interesantes. Y eso me pasó tras marcharme de la cafetería de la Casa Encendida porque a las 20:00h de un miércoles no les quedaba nada que acompañar un triste café. Por suerte a unos escasos 300 metros me topé con un sitio de reciente apertura, os hablo de Pum Pum Café.
No hay letreros que te indiquen el camino, así que si no prestas atención te lo pasas, una tímida serigrafía en su fachada te anuncia que un nuevo café ha llegado al barrio. Y lo hace pisando fuerte, porque según me contaron ellos mismos, suele llenarse bastante con apenas un par de meses de vida.
Yo tuve suerte y un miércoles a las 20:00h me lo encontré algo vacío, una hora que os recomiendo si queréis conocerlo y probar su cocina tranquilamente, porque los fines de semana lo tienes más complicado para encontrar mesa, es pequeño, con un número reducido de sillas. De vigas y ladrillo visto, su decoración es simple pero atractiva, con mesas y sillas recicladas, tipo cole. Adecuado con su apuesta por lo natural.
Pum Pum Café es una cafetería vegetariana-vegana que apuesta también por el buen producto, utilizan para sus cafés leche fresca de Priégola (tienen de soja), de la sierra de Madrid. Su pan es de masa madre traído cada día de “Madre Hizo Pan” (que puedes comprar allí para casa desde 2€) y el café es de Etiopía pero tostado en España, se lo tuestan los chicos de “Toma Café”, así que con tales referencias es un punto a su favor. Utilizan de máquina La Marzocco.
Me pedí un capuccino con mocca (3€), el café muy bueno de sabor, no necesita azúcar, pero le faltaba cuerpo a la espuma, estaba floja y algo corto de mocca que pasaba desapercibida. Pero en general café de buen sabor. Y para acompañarlo una Tosta de Tomate (2€), utilizan mini baguettes crujientes.
Puedes pasar a cualquier hora de 9 a 21h a comer, eso me gusta, no limitar los horarios. Incluso en fines de semana, el brunch no tiene hora, lo ofrecen todo el día los sábados, domingos y festivos (precios entre 5€ y 15€). Su carta la componen platos vegetarianos y veganos, tienes ensaladas (6,50€), sándwiches y hamburguesas (desde 3,50€), tostas (desde 2€) y huevos Benedict (4,50€). De postre tartas caseras y cookies. Si eres de buen pan, aquí los encontrarás variados; de nueces, multicereales, payés, de miel y naranja, gallego… Y para los cafeteros variedad de cafés desde 1,50€ el expresso y 1,60€ el cortado.
Ambiente tranquilo (a la hora que yo pasé) y servicio amable, aunque necesita rodaje… Eché en falta que me vendiesen alguno de sus productos estrella en carta, por redes he visto que sus huevos benedict, tostas y ensaladas tienen muy buena pinta, así que tengo pensado volver. En esta ocasión probaré otro tipo de café y ya os contaré. Elaboran la repostería ellos menos los croissant que se los traen hechos (la masa) y solo los hornean.
¿NOS VEMOS EN PUM PUM CAFÉ?
Calle Tribulete, 6. Metro: Embajadores y Lavapiés.
Horario: de lunes a viernes de 9:00h a 21:00h, sábados y domingos de 10:00h a 21:00h.
No admiten reservas.
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